¿Quiénes somos y que hacemos aquí?

Desde muy pequeña me sentí abrumada por la inmensidad del universo y por no saber por qué —o para qué— estamos vivos.

Me angustiaba tanto que, en un momento, tuve que decidir no pensarlo más. Creo que, de alguna manera, esa pregunta me hacía sentir sola.

Y así, por mucho tiempo, dejé de planteármela.

Hasta que se volvió inevitable comenzar a buscar respuestas.

Porque a veces, lo que más necesitamos para recuperar nuestra salud mental, es encontrar sentido a nuestra existencia.

Entender estas teorías me ha ayudado, de alguna forma, a sentirme más liviana en el día a día. Como si se hubiera calmado una incertidumbre de la que no fui realmente consciente hasta que se disipó.

Así que aquí te comparto lo que he encontrado en mi exploración, por si también te sirve.

¿Quiénes somos y qué hacemos aquí? Cuatro teorías que me ayudaron a entenderlo

Si bien no existe una única teoría que explique de forma definitiva quiénes somos y qué hacemos aquí, estas cuatro grandes perspectivas pueden ayudarte a obtener claridad.

La teoría “más probable” dependerá del tipo de conocimiento que consideres más válido: científico, filosófico, espiritual o experiencial.

1. Modelo científico

Quiénes somos: Seres biológicos evolucionados a partir de organismos unicelulares, con conciencia emergente del cerebro.

Qué hacemos aquí: Desde esta perspectiva, no hay un propósito intrínseco, pero como seres conscientes podemos crear uno.

Qué es el universo: Un espacio-tiempo nacido del Big Bang, gobernado por leyes físicas y en expansión.

Probabilidad: Alta dentro de la comunidad científica, por su base empírica. No responde al “para qué”, pero sí al “cómo”.

2. Modelo espiritual

Quiénes somos: Una conciencia única experimentándose a sí misma a través de formas individuales (el "yo" es una ilusión).

Qué hacemos aquí: Recordar nuestra verdadera naturaleza, trascender la ilusión de separación y sufrimiento.

Qué es el universo: Una manifestación de la conciencia; no es un objeto, sino una experiencia proyectada.

Probabilidad: Alta entre quienes han tenido experiencias místicas. Difícil de probar científicamente, pero internamente coherente.

3. Modelo sistémico

Quiénes somos: Parte de un sistema en evolución, tanto biológica como culturalmente. Somos conciencia en proceso de complejización.

Qué hacemos aquí: Contribuir al desarrollo de una conciencia más integrada, ética y cooperativa.

Qué es el universo: Un proceso creativo autoorganizado, donde la materia da paso a la vida, y ésta a la conciencia.

Probabilidad: Atractiva para quienes integran ciencia y espiritualidad. Tiene respaldo en teoría de sistemas, evolución y desarrollo humano.

4. Modelo simbólico

Quiénes somos: Portadores de arquetipos universales. La vida humana se desarrolla como un viaje simbólico del alma.

Qué hacemos aquí: Vivir un proceso de individuación, enfrentando sombras y despertando a nuestro ser esencial.

Qué es el universo: Un espejo simbólico de nuestra psique. La realidad externa refleja procesos internos.

Probabilidad: Muy significativa en términos experienciales y psicológicos. Da sentido personal y colectivo a la existencia.

Una visión integradora para el alma y la razón

Desde una mirada integradora, tal vez el Big Bang no fue un evento accidental, sino un acto de conciencia desplegándose para experimentarse.

El universo nace para conocerse, jugar, amar, recordar y evolucionar.

Venimos a vivir, a sentir, a aprender y a liberar. A cruzar velos de ilusión y a encarnar lo que realmente somos: seres creativos, interconectados y conscientes.

No hay una única misión para todos, pero sí un patrón común: recordar. Recordar que no estamos rotos, que no estamos solos, y que cada experiencia —por dolorosa o confusa que sea— forma parte de un camino evolutivo.